Hablar de salud sexual es hablar de autocuidado, respeto y responsabilidad. Muchas infecciones de transmisión sexual (ITS) se pueden evitar y tratar, pero para eso necesitamos información clara y sin prejuicios. Una de ellas, la gonorrea, sigue siendo muy común a nivel mundial y aún carga con estigmas que dificultan su detección temprana 🧬.

En este artículo vamos a ver qué es la gonorrea, cómo se transmite, cuáles son sus síntomas (incluso cuando no se manifiestan), qué consecuencias puede tener si no se trata y qué cuidados necesitamos incorporar para protegernos y proteger a otros.

¿Qué es la gonorrea?

La gonorrea es una infección de transmisión sexual causada por una bacteria llamada Neisseria gonorrhoeae. Puede afectar tanto a mujeres como a hombres, y se transmite al tener relaciones sexuales vaginales, anales u orales sin protección.

Al igual que otras ITS, muchas veces no presenta síntomas visibles, especialmente en las mujeres. Por eso, es clave conocer sus formas de transmisión y hacer controles regulares.

📊 Según la OMS, cada año se producen más de 80 millones de nuevos casos de gonorrea en el mundo. Es una infección frecuente, pero prevenible y tratable.

¿Cómo se transmite?

La gonorrea se transmite por contacto con fluidos infectados durante relaciones sexuales. Es decir, a través de:

  • Relaciones vaginales sin preservativo
  • Sexo anal sin protección
  • Sexo oral sin protección (puede causar infección en la garganta)
  • Contacto genital sin penetración, si hay fluidos involucrados
  • De madre a hijo durante el parto, si no se ha tratado previamente

No se transmite por besos, compartir cubiertos o sentarse en un inodoro. Pero sí requiere cuidado porque es muy contagiosa entre parejas sexuales.

¿Cuáles son los síntomas más comunes?

Los síntomas suelen aparecer entre 2 y 14 días después del contagio. Pero muchas personas no presentan signos visibles o los confunden con otras afecciones. Estos son los más frecuentes:

En mujeres:

  • Flujo vaginal amarillento o verdoso
  • Dolor o ardor al orinar
  • Sangrados entre períodos o después de relaciones sexuales
  • Dolor abdominal o pélvico
  • Dolor durante las relaciones

En hombres:

  • Secreción del pene (blanca, amarilla o verdosa)
  • Ardor al orinar
  • Dolor o inflamación en los testículos

En ambos (si hay sexo oral o anal):

  • Dolor de garganta persistente
  • Secreción anal, picazón, dolor o sangrado

Ante cualquier sospecha, es importante consultar con un profesional de salud y hacerse un test. Incluso si no tenés síntomas, es recomendable realizar controles si tuviste una pareja nueva o relaciones sin protección.

¿Qué riesgos tiene si no se trata?

Si la gonorrea no se detecta y trata a tiempo, puede causar complicaciones importantes:

  • En mujeres: enfermedad inflamatoria pélvica (EIP), infertilidad, embarazo ectópico
  • En hombres: epididimitis (infección testicular), infertilidad
  • En ambos: infección en las articulaciones o la sangre (gonorrea diseminada), mayor riesgo de contraer o transmitir VIH
  • En recién nacidos: ceguera, infecciones graves si la madre no fue tratada

La gonorrea es una infección que no se cura sola, y no se puede tratar eficazmente con remedios caseros. Requiere atención médica.

¿Cómo se diagnostica?

El diagnóstico de gonorrea se hace de forma sencilla con:

  • Una muestra de orina
  • Un hisopado vaginal, uretral, anal o de garganta (según prácticas sexuales)

Las pruebas son rápidas y en muchos centros de salud o programas de ITS pueden ser gratuitas o de bajo costo. También se suelen hacer junto a otras pruebas como VIH, sífilis o clamidia.

¿Qué tratamiento tiene?

La gonorrea se trata con antibióticos recetados. Sin embargo, en los últimos años han surgido cepas resistentes, por lo que los tratamientos pueden cambiar y deben ser indicados por un profesional.

El tratamiento actual generalmente incluye:

  • Una inyección de ceftriaxona
  • Y en algunos casos, también un antibiótico oral (azitromicina u otros)

Es clave no automedicarse y completar el tratamiento, incluso si los síntomas desaparecen antes. También se recomienda que todas las parejas sexuales recientes reciban tratamiento para evitar reinfecciones.

¿Cómo prevenir la gonorrea?

La mejor herramienta es la prevención. Algunas acciones simples pueden marcar una gran diferencia:

  • Usá preservativo o campo de látex en todas las prácticas sexuales (incluso sexo oral)
  • Hacete controles regulares si sos sexualmente activo
  • Hablá abiertamente con tus parejas sobre ITS
  • Limitá el número de parejas sexuales si querés reducir riesgos
  • Si tuviste una ITS, avisá a tus parejas para que puedan testearse
💬 Cuidarte también es cuidar al otro. Hablar de ITS no debería ser un tabú. La salud sexual se construye en confianza y responsabilidad mutua.

✅ Recomendación final

Si tenés alguna condición médica, consultá con un profesional de salud antes de aplicar esta información. Cada cuerpo es distinto, y la orientación profesional siempre es lo más seguro.

En la sección Enfermedades de Transmisión Sexual de microsalud.blog podés encontrar más consejos y herramientas para mejorar tu bienestar. No estás solo en este camino 💪.

Referencias confiables